Hay mil cartas que escribí con el alma pero que nunca envié
igual te desee el mejor de los momentos aquí y ahora, mañana y siempre
para un ave fénix, para tí, mi ave fénix.
Deseoso de elevarte y rehacerte de tus cenizas añoré
que tu vuelo fuera un gentil renacer, un batir de alas imperceptible y poderoso
dondequiera que esa fuerza te lleve, no tengas miedo de caer.
Eres un ave brillante que cae... tan alto...tan alto,
en el profundo abismo entre bellos sueños y realidades
en un mar de paz flotan livianas tus plumas argentadas
meciéndose al viento hasta llegar a un muelle de paz
que no es sino un cálido abrazo al despertar.
martes, 14 de septiembre de 2010
Ave Fénix cae más alto!
21:13
Jen Sainz
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